El éxito y el fracaso no existen en el presente.
La sensación de caos ante el sufrimiento,ante la decisión de pelear o huir,pronto serán resueltas.
Decidir saborear este dolor perenne de lactato indisoluble o por contra las mieles del confort de la derrota consentida, son solo argucias del poderoso ego,son trampas del simio que habita en mi.
Si no hay destino,mas que el ahora,siempre lo abre alcanzado.Mientras tanto , seguirá el lobo guiando mis pasos desde lo alto del cerro cual quimera impasible bajo la lluvia .